En la etapa de la historia en que vivimos, debido a los
hábitos de vida sedentarios y una alimentación cada vez menos sana, el corazón se ha convertido en uno de los
órganos que más muertes causa por mal funcionamiento. Este hecho lo declaró ya
la Organización Mundial de la Salud en 1992 cuando definiendo a las
enfermedades cardiovasculares o ECV como “el enemigo público número uno”.
Por este motivo, la Organización Mundial de la Salud junto a
la Federación Mundial del Corazón establecieron que tal día como hoy fuera el
Día Mundial del Corazón. Esta iniciativa busca que la población sea consciente
de la delicadeza de asunto y los países realicen concienciación en la población
sobre su salud. Realizar actividades físicas aeróbicas o reducción de grasas en
nuestra dieta son hábitos de vida que pueden resultar beneficiosas para nuestra
salud, no a corto plazo sino a largo teniendo una mayor esperanza de vida.
A causa de enfermedades cardiovasculares, en el mundo mueren
cada año más de 17 millones de personas. Estas mortíferas enfermedades deben
ser explicadas no solo a las personas que se encuentra en edad de alta
probabilidad, sino que debe ser algo que ha de enseñarse a todos los niveles para interiorizar
estas costumbres saludables.
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