Rico en proteínas y calcio, el queso es un producto óptimo en la alimentación infantil. Dada la gran variedad de quesos que existen en el mercado, siempre habrá alguno que sea el favorito de los niños. Los quesitos en porciones suelen ser unos de sus grandes aliados, tienen un sabor suave, una textura blanda y cremosa y se comen fácilmente. ¿Preparamos unos graciosos aperitivos de fiesta con ellos?
Preparación
1. El primero de los ratoncitos lo elaboramos con una porción de queso montado sobre una galleta salada. Para poner las orejas al ratón, cortamos dos rodajitas de salchichas. Con un trozo de aceituna negra obtendremos la nariz y utilizaremos dos semillas de sésamo (o algún puntito de salsa) para los ojos. Para la cola, una tira de cebollino, por ejemplo.
2. El otro ratoncillo de queso tiene por orejas dos galletitas saladas. La nariz podemos hacerla pinchando un trocito de tomate cherry, y para ojos nos sirven dos puntitos de aceituna. Uy, este ratón no tiene cola. ¿Con qué ingrediente podríamos ponérsela?
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