La menta, tanto si se trata de una infusión de menta poleo, menta piperina, o utilizándola fresca para dar sabor a una bebida, posee muy buenas propiedades digestivas, que lo engloban dentro de los llamados alimentos “quemagrasas”, es decir, aquellos que aceleran el metabolismo a la par que queman calorías de forma rápida deshaciendo depósitos de grasa acumulada entre los tejidos. La menta además, al ser un alimento natural, resulta más saludable que los quemagrasa artificiales o químicos.
Otros modos de consumir la menta para potenciar sus efectos adelgazantes son a través del té moruno o té a la menta muy popular en la cultura árabe, que suma a las propiedades de la menta para quemar grasas, los beneficios del té verde para adelgazar. Sin duda una combinación que no os podéis perder.
Por otra parte, como ya os adelantábamos, la menta fresca se puede agregar a otras recetas con té, dándole un toque único e inigualable, además de aportar a la infusión en cuestión, tanto sus efectos digestivos como diuréticos.
En cualquier caso, existen exquisitas formas de prepararlo que superan con creces la versión de una simple infusión. Un ejemplo, la siguiente receta:
Ingredientes
· té verde
· agua hirviendo
· 1 naranja
· 1 limón
· estevia a gusto
· menta fresca
Preparación
1. Infusionar el té verde en el agua hirviendo durante 5 minutos.
2. Cortar la naranja y el limón en rodajas y colocar en una jarra
3. Verter el té caliente sobre la fruta.
4. Agregar la estevia y la menta fresca y dejar enfriar.
5. Servir en vasos altos con hielo
¿Y vosotros, que recetas tenéis?
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